1. Antón Chéjov (1860-1904)
Dramaturgo y autor de relatos, Antón Chéjov es uno de los escritores más destacados de la
literatura rusa del siglo XIX. La crítica moderna considera a Chéjov uno de los maestros del
relato. Y dentro del teatro ruso se le considera como un representante fundamental del
naturalismo moderno.
Sus obras dramáticas, lo mismo que sus relatos, son una crítica constante de la sociedad que le
tocó vivir, la Rusia anterior a la revolución de 1905, donde refleja la inquietud de sus personajes
por crear un mundo mejor… y su frustración. Para presentar estos temas,Chéjov desarrolló una
nueva técnica dramática, que él llamó de “acción indirecta”. Para ello diseccionaba los detalles
de la caracterización e interacción entre los personajes más que el argumento o la acción directa.
En una obra de teatro de Chéjov muchos acontecimientos dramáticos importantes tienen lugar
fuera de la escena y lo que se deja sin decir es muchas veces más importante que las ideas y
sentimientos expresados.
Maestro en el tacto emocional y el dibujo de los personajes, con inclinación al miramiento
crítico en unos textos impregnados de sensibilidad y sentido del humor, Chéjov falleció en 1904
causa de la tuberculosis que padeció durante toda su vida.